El triunfo inicial de una temporada significa siempre una descarga emocional que sirve para levantar en lo anímico y dotar de confianza a los esquemas ensayados y a la valoración personal de cada uno de los jugadores. Ante todo el Lobo tuvo un buen funcionamiento en el juego interno y contó con un ataque picante que le permitió vencer hasta con holgura en algún pasaje.
Del chico inicial se rescata el gol interior del foráneo paranaense y la respuesta a puro triple del local, con aciertos y errores repartidos, sobre todo en la defensa. El albiazul con dos triples de Moravansky rompió la paridad, y generó una superioridad en la pintura Gimnasia a la cual le agregó gol externo, ya que Manzanares y Barovero facturaron dos bombas para desestabilizar aún mas a un conjunto entrerriano pálido en defensa y anémico en ataque. Pero Pardal y Cliffton sacaron la cara por sus compañeros y un triple de Vesco sobre la chicharra provocó que otra vez el empate lleve de recuerdo al primer tiempo. Esta vez la chapa marcó tablas en 41. En los primeros dos cuartos el partido fue un himno a la igualdad. La prioridad fue recargar la pintura para conseguir gol y cuando se podía perforar con triples la zona planteada por ambos entrenadores.
Luego del entretiempo la estrategia del coach Dececco no tuvo secretos, todo se volcó en lo que podía hacer su extranjero internado en la pintura con la ayuda de Pardal y así seguir dando pelea. Del otro lado Villa y el empuje de Bendel pudieron más, ya que los suyos se fueron gananciosos por un triple de diferencia.
Pero si algo le sobró al tripero fueron ganas. Más allá que por momentos se desbordaba en el intento, era valorable la actitud de siempre ir a buscar, aunque a veces cometiendo errores. Y así insistió y obtuvo réditos; Rivera (3/5 en triples) tuvo apariciones mortales y el equipo encontró la profundidad exacta para cerrar tranquilo y definirlo con cierta holgura. Con solidaridad, juego en equipo e interesantes labores individuales (Villa, Rivera y Barovero) Ronaldo Córdoba pudo festejar con sus muchachos su primer triunfo ante un rival absolutamente gris.
Ganó el Lobo, no solo en el marcador, sino en tranquilidad y para liberar presiones y se sacó la mochila de obtener los primeros dos puntos. Está intentando encontrar su camino, será cuestión de ir sacando los obstáculos de su senda.
SÍNTESIS:
Gimnasia (78): Fernando Rivera (15), Pablo Bendel (9), Alejo Barovero (18), Lisandro Villa (x)(17) y Tez Banks (5)(FI). Gabriel Moravansky (6), Ezequiel Manzanares (3) y José Ojeda (5). DT: Ronaldo Córdoba.
Atlético Echagüe (67): Santiago Vesco (6), Leopoldo Ruiz Moreno (2), Oscar Heis (0), Sebastián Pardal (x)(18) y Emanuel Cliffton (20)(FI). Gustavo Souto (8), Mauro Rostchy (6), Matías Barberis (1) y Lisandro Ruiz Moreno (6). DT: Ricardo Dececco.
Parciales: 20-20, 21-21 (41-41), 17-14 (58-55) y 20-12 (78-67).
Jueces: Raúl Lorenzo y Alejandro Trias.
Por Ezequiel Del Bueno
Del chico inicial se rescata el gol interior del foráneo paranaense y la respuesta a puro triple del local, con aciertos y errores repartidos, sobre todo en la defensa. El albiazul con dos triples de Moravansky rompió la paridad, y generó una superioridad en la pintura Gimnasia a la cual le agregó gol externo, ya que Manzanares y Barovero facturaron dos bombas para desestabilizar aún mas a un conjunto entrerriano pálido en defensa y anémico en ataque. Pero Pardal y Cliffton sacaron la cara por sus compañeros y un triple de Vesco sobre la chicharra provocó que otra vez el empate lleve de recuerdo al primer tiempo. Esta vez la chapa marcó tablas en 41. En los primeros dos cuartos el partido fue un himno a la igualdad. La prioridad fue recargar la pintura para conseguir gol y cuando se podía perforar con triples la zona planteada por ambos entrenadores.
Luego del entretiempo la estrategia del coach Dececco no tuvo secretos, todo se volcó en lo que podía hacer su extranjero internado en la pintura con la ayuda de Pardal y así seguir dando pelea. Del otro lado Villa y el empuje de Bendel pudieron más, ya que los suyos se fueron gananciosos por un triple de diferencia.
Pero si algo le sobró al tripero fueron ganas. Más allá que por momentos se desbordaba en el intento, era valorable la actitud de siempre ir a buscar, aunque a veces cometiendo errores. Y así insistió y obtuvo réditos; Rivera (3/5 en triples) tuvo apariciones mortales y el equipo encontró la profundidad exacta para cerrar tranquilo y definirlo con cierta holgura. Con solidaridad, juego en equipo e interesantes labores individuales (Villa, Rivera y Barovero) Ronaldo Córdoba pudo festejar con sus muchachos su primer triunfo ante un rival absolutamente gris.
Ganó el Lobo, no solo en el marcador, sino en tranquilidad y para liberar presiones y se sacó la mochila de obtener los primeros dos puntos. Está intentando encontrar su camino, será cuestión de ir sacando los obstáculos de su senda.
SÍNTESIS:
Gimnasia (78): Fernando Rivera (15), Pablo Bendel (9), Alejo Barovero (18), Lisandro Villa (x)(17) y Tez Banks (5)(FI). Gabriel Moravansky (6), Ezequiel Manzanares (3) y José Ojeda (5). DT: Ronaldo Córdoba.
Atlético Echagüe (67): Santiago Vesco (6), Leopoldo Ruiz Moreno (2), Oscar Heis (0), Sebastián Pardal (x)(18) y Emanuel Cliffton (20)(FI). Gustavo Souto (8), Mauro Rostchy (6), Matías Barberis (1) y Lisandro Ruiz Moreno (6). DT: Ricardo Dececco.
Parciales: 20-20, 21-21 (41-41), 17-14 (58-55) y 20-12 (78-67).
Jueces: Raúl Lorenzo y Alejandro Trias.
Por Ezequiel Del Bueno
