Que Mar Del Plata paso a ser en los últimos años una de las ciudades mas importantes de nuestro país, en cuanto al básquet se refiere no hay demasiada discusión. Y no hablamos solo de los títulos o logros conseguidos por los equipos de la feliz, sino por la pasión que demuestran las diversas hinchadas de los conjuntos que representan a la reina de la costa atlántica en nuestra Liga Nacional.
Peñarol y Quilmes son hoy, dos de los protagonistas que están tratando de encontrar algo indispensable para poder pasar una buena temporada, un plantel competitivo. Pero ambos los hacen por diferentes caminos.
El milrrayitas con una billetera mas abultada que la de su eterno enemigo, ya tiene contratados a Sebastian "Tato" Rodríguez, Marcos Mata, Alejandro Diez, Román González, Lucas Picarelli y a uno de los mejores extranjeros de la temporada pasada, Byron Johnson, el ex Independiente de Neuquén, jugador saltarín y versátil si los hay, con buen promedio de puntos (mas de 20 en la ultima competencia) y con una gran cantidad de rebotes, algo que Peñarol precisa para basar en ellos el juego que le gusta a Sergio Hernández su entrenador, el poder correr la transición ofensiva.
A ellos hay que sumarle el regreso de alguien que dejo un sello muy importante en la hinchada peñarolense en la temporada 2006-2007 cuando el equipo que dirigía en ese momento el tucumano Carlos Romano llegara a disputar la final con Boca Junior equipo que a la postre se consagrara en esa temporada, hablamos de José "Bum Bum" Muruaga que regresa luego de pasar un año en Estudiantes de Bahía Blanca.
Al equipo le faltan solo detalles para ponerse de una vez por todas la ficha de candidato. Existen en la actualidad gestiones por Diego García, y otro foráneo que sea determinante bajo los cestos.
La gente quiere otra alegría a nivel local, como aquella que lograra en el estadio Superdomo en el año 1995 bajo la conducción de Néstor "Che" García, o una parecida como la que el equipo del "oveja" Hernández consiguiera el año pasado haciendo historia conquistando la primera edición de la Liga de las Américas.
Y recordando aquel campeonato de Peñarol del 95, paradójicamente, uno de los protagonistas de dicho acontecimiento es hoy el encargado de tener su primera misión como entrenador, pero en la vereda de enfrente, El "cabezón" Esteban de la Fuente fue el elegido por al comisión de básquet de Quilmes para que conduzca el barco cervecero en la próxima temporada, tras el alejamiento de Oscar "huevo" Sánchez. Es sin dudas una apuesta fuerte, como tirar una moneda al aire, nadie duda de la capacidad o conocimiento del juego del entrenador de turno para jugar al básquetbol en sus años de gloria, pero es una incógnita como puede responder en este nuevo rol, en una plantilla que esta necesitada de grandes campañas.
Lo de Quilmes es mas complejo, no hay grandes presupuestos, los jugadores que estaban primeros en la lista de refuerzos no llegaron y los encargados de armar el plantel están tratando de al menos mantener lo que tenían en la campaña anterior. Por eso ya tienen abrochado a Hernando "El Pini" Salles, Maximiliano " la fiera" Maciel y a Selem Safar, todos continúan en la institución. El único que llego procedente del rojo de Neuquén es Esteban López.
La mano viene dura en cuanto a las contrataciones. Pero el consuelo y la ilusión para el tricolor se basa en saber que no siempre billetera gorda asegura el éxito. Lo importante en este deporte es conseguir una química de equipo, como seguramente la va a implementar De la Fuente acentuando su juego en lo que el hacia en el rectángulo en su época de player, defender muy duro todo el partido.
Hasta el momento así se arma Mar del Plata. Uno apuesta fuerte, el milrrayita, el otro apuesta poco, el cervecero. Veremos quien saca el primer pleno cuando comience a rodar la primera bola de próxima temporada.
Por Sebastián Echeverría
